En octubre se conmemora el Día Internacional de la Niña, una fecha para recordar que las palabras también construyen. Desde los primeros años, los elogios que reciben las niñas pueden influir profundamente en cómo se ven a sí mismas y en la confianza que desarrollan.
Este año, diferentes organizaciones internacionales promueven la idea de cambiar la forma en que elogiamos a las niñas, animando a los adultos a destacar su inteligencia, valentía o creatividad por encima de la apariencia física. Un gesto simple, pero con un impacto enorme.
Más Allá De La Apariencia Existe Una Vida
Desde muy pequeñas, muchas niñas escuchan más comentarios sobre cómo lucen que sobre lo que hacen. Aunque un “qué bonita” suena tierno, cuando se repite sin pausa puede enviar el mensaje equivocado: que el valor personal depende del aspecto físico.
Por eso, psicólogos y educadores recomiendan ampliar el tipo de cumplidos y empezar a reconocer otras cualidades. Decir “qué lista eres”, “qué valiente”, o “me gusta cómo resolviste eso” ayuda a construir una autoestima más sólida y realista.
Por Qué Las Palabras Importan
Estudios recientes han revelado que niñas de tan solo tres años ya muestran preocupación por su aspecto, influenciadas por los comentarios de su entorno. Esa tendencia, según especialistas, puede convertirse en una carga emocional a medida que crecen.
Las Naciones Unidas y otras instituciones dedicadas a la infancia subrayan la importancia de promover un lenguaje positivo que resalte valores, habilidades y logros. Cambiar la manera de elogiar no requiere esfuerzo, pero puede prevenir inseguridades que acompañan a las niñas durante su desarrollo.
Confianza Corporal Y Autoestima
La confianza en el propio cuerpo y la seguridad emocional son pilares del bienestar infantil. Expertos en desarrollo afirman que una autoestima fuerte puede influir en el rendimiento académico, las relaciones sociales y la salud mental.
En la actualidad, muchas niñas y adolescentes enfrentan presión por cumplir con estándares de belleza poco realistas. Hablar sobre la diversidad, la autenticidad y los logros personales ayuda a contrarrestar esa influencia y a formar generaciones más seguras y conscientes.
Un Cambio Que Comienza En Casa
El cambio empieza con algo tan simple como elegir mejor las palabras. En casa, en la escuela o entre amigos, los elogios son una oportunidad para reforzar la confianza. No se trata de dejar de decir “qué linda”, sino de sumar más mensajes que destaquen la inteligencia, la empatía o la determinación.
Cada cumplido tiene el poder de convertirse en una herramienta de apoyo o de presión. Usarlo de forma consciente es una manera de construir un entorno donde las niñas crezcan sabiendo que valen por lo que son, no solo por cómo lucen.
Un Gesto Pequeño, Un Impacto Grande
La invitación es sencilla: cambiar el cumplido. Reconocer el esfuerzo, la generosidad o la creatividad es una forma de mostrar amor y respeto. Lo que parece una frase casual puede convertirse en una semilla de confianza que acompañe a una niña toda la vida.
El Día Internacional de la Niña nos recuerda que la igualdad también se construye desde las palabras. Y que cambiar la manera en que elogiamos puede ser una de las formas más poderosas de empoderar a las futuras generaciones.
En distintas plataformas y espacios educativos ya se comparten materiales gratuitos que ayudan a padres y maestros a iniciar conversaciones sobre autoestima y confianza con niñas y adolescentes. La clave está en usar el lenguaje para abrir puertas, no para limitar.





